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Eichenwald, Kurt
Nació en Nueva York en 1961. Tras licenciarse en 1983, empieza su andadura profesional como periodista en varios medios y publicaciones, entre ellas The Washington Monthly y The New York Times. En 1985 se convierte en editor asociado de The National Journal, cargo que alterna con artículos sobre política para The New York Times. En 1988 asume para este diario la responsabilidad de la información sobre Wall Street, cometido que coincide con la explosión de escándalos financieros en el mundo de las altas finanzas de su país, de los que a partir de entonces se convertirá en incansable investigador y fiel cronista. Su incisiva labor como periodista ha merecido galardones tan prestigiosos como el George Polk Award y el Payne Award for Ethics in Journalism, y su distinción como finalista del premio Pulitzer de periodismo. Su trabajo de investigación se ha convertido en la base de sus libros, en los que con un estilo que encauza directamente con el de las novelas policíacas denuncia las prácticas irregulares o directamente ilícitas de algunas de las grandes corporaciones empresariales estadounidenses. Así, en su ópera prima, Serpent on the rock (1995), Eichenwald retrataba el escándalo de la aseguradora Prudential Securities, que durante la década de 1980 estafó a más de trescientas mil personas por una cantidad que superaba los ocho mil millones de dólares. EI libro se convirtió en un best seller y fue saludado con grandes elogios por la crítica, que acogió con entusiasmo aún mayor su segundo título: El confidente, donde retrata el escándalo de la fijación de precios por parte de la empresa agroalimentaria Archer Daniels Midland y que fue aclamado per el New York Times Boock Review como uno de los mejores libros de no ficción de los noventa. Con posterioridad, Eichenwald ha publicado Conspiracy of fools (2005), sobre el escándalo Enron, y en la actualidad está trabajando en el que será su cuarto libro, un exhaustivo análisis del funcionamiento de las fuerzas de inteligencia y seguridad estadounidenses tras los atentados del 11 de septiembre.
Fotografía Jessica D’Onofrio